Agentes de Israel secuestran en Argentina al criminal nazi Adolf Eichmann
Un día como hoy, del año 1960, el servicio secreto israelí, Mossad, perpetraba en Argentina la llamada Operación Finale, conocida en los medios como Operación Garibaldi, cuando secuestró al fugitivo jerarca nazi Adolf Eichmann para trasladarlo ilegalmente a Israel.
Si bien Eichmann ya había sido localizado y denunciado por el inmigrante judío Lothar Hermann, en 1957, Israel decidió archivar la denuncia y postergar cualquier operación hasta el año 1960, momento en el que consideró adecuado librar una maniobra de inteligencia que diera captura al fugitivo y lo trasladara directamente a Israel.
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El oficial nazi Adolf Eichmann fue organizador de la maquinaria que llevó a la muerte a millones de judíos, prisioneros de guerra e integrantes de minorías de la Europa ocupada. Con la complicidad de las autoridades argentinas, logró huir de su condena en Alemania y establecerse en las afueras de Buenos Aires, bajo el alias de Ricardo Klement.
El 11 de mayo de 1960, un comando judío logró interceptarlo cuando Eichmann regresaba de su trabajo en la planta bonaerense de Mercedes Benz. Tras ser drogado, fue trasladado al aeropuerto internacional de Ezeiza, en donde abordó el avión de una delegación deportiva israelí, de visita en Argentina.
Las autoridades de la policía aduanera jamás sospecharon algo en torno a Eichmann, que fue reportado como enfermo para justificar su estado de inconciencia. Más tarde, cuando la noticia del secuestro fue conocida a nivel internacional, el gobierno argentino elevó una protesta ante la ONU.
Para entonces, el proceso de juzgamiento en la capital hebrea ya había comenzado: Eichmann fue finalmente condenado a morir en la horca por crímenes contra la Humanidad, el 15 de diciembre de 1961, y ejecutado el 1 de junio de 1962.